Eleva tus Estándares
¿Qué diferencia hay en las personas que tienen altísimos resultados a aquellas personas que no?
La gran diferencia es el nivel de sus estándares. Las habilidades y competencias son parte de nuestro inventario personal que abre puertas y nos hace el camino más fácil, sin embargo no lo son todo.
Cuando tenemos claros nuestros estándares, sencillamente no lo consideramos opcional, debe ocurrir, porque es mi expectativa y necesidad de que se realice.
En este sentido, cobra muchísima importancia hacerme consciente que mi vida y mis resultados están definidos sobre los estándares que me he puesto hasta ahora. Pues si, el cuerpo tonificado o fuera de peso que tengo, mis finanzas, mis relaciones y hasta mi éxito profesional depende de lo que para mi es opcional o no alcanzar.
En otras palabras, nuestros estándares se convierten en «tengo que…»
La diferencia de las personas que tienen ÉXITO es que transforman el «debería» (que es opcional la mayoría de las veces) por el «tengo que». Los «debería» son deseos, y los deseos normalmente no están acompañados de suficiente fuerza o determinación.
Así que si nuestros resultados se basan en nuestros estándares, éstos definen nuestra vida.
Pero entonces, ¿qué es un estándar? ¿Cómo ese estándar puede impactar en q yo sea mejor profesional o que tenga mejores o menores resultados…?
El estándar genera una expectativa, sobre ellos nos definimos. Así que bien vale la pena preguntarnos, ¿Cómo me defino yo desde mis estándares ? Por ejemplo, si me defino inteligente al estudiar una materia, entonces no me permito sacar menos de 4/5 en un examen y haré lo necesario para aprender y prepararme para la prueba.
Un estándar es un parámetro sobre la cual nos evaluamos, es una base que puede ser un número, un indicador, una meta, o una marca que queremos mejorar.
¿El ambiente influye en el estándar que obtenemos? Si, el ambiente influye mucho sobre todo sí queremos modelar o ser parte de ese ambiente… pero no determina nuestra realidad.
Lo que practicamos y hacemos en privado, esos pequeños rituales, cuando nos levantamos o cuando estamos solos, son los que nos genera el impacto o resultado en público.
Puedo modelar a personas para que se conviertan en referencias o nuevos estándares… Aunque es mucho más poderoso mejorarse así mismo.
De está manera puedo potenciar mi ciclo virtuoso de crecimiento:
1.Me establezco un estándar alto
2.Me lo creo, me me comprometo a ello. No es opcional
3.Actúo en congruencia
4.Comienzo a obtener resultados alineados
5. Me entusiasmo
6. Refuerzo mi estándar y creo nuevos retos.
Igual pasa con quienes podemos caer en los círculos viciosos de la falta de ambición y metas, el ciclo se revierte hasta convencernos de que no somos capaces de alcanzar nuestros objetivos y abandonamos.
¿y cómo transformar mis estándares en rituales poderosos?
Los rituales o hábitos son esas pequeñas cosas que si la sumamos día a día transforman nuestra vida. Son los patrones de comportamiento buenos o malos que finalmente nos definen.
No somos producto de lo que deseamos, ni siquiera somos producto de lo que queremos, somos productos de los rituales y de los patrones con lo que actuamos día a día y eso rituales y patrones son los que transforman mis «debería» en «tengo que»
Para terminar el artículo de hoy, te invito a reflexionar… ¿Qué estandares te definen? y ¿Qué rituales o hábitos sostienen que esos estándares se cumplan o no en tu día a día?